EPM, como entidad pública prestadora de servicios, instaura la responsabilidad social como eje transversal que
guía sus acciones como parte constitutiva de su estrategia de crecimiento y propósito de sostenibilidad. En su
devenir como grupo, EPM se ve convocada a establecer un puente entre la organización y la sociedad, apostándole
a la responsabilidad y proceder de su tejido humano.
Para ello la Organización se plantea tres preguntas: ¿En qué nivel ético se encuentra EPM?, ¿A qué nivel de
desarrollo ético aspiramos?, ¿Cómo podemos alcanzar cada vez un desarrollo ético más incluyente?
La respuesta a cada una de estas preguntas parte de la observación del pensamiento organizacional que rige las
acciones de nuestros funcionarios. Este pensamiento no es estático; por el contrario, va adquiriendo nuevas
formas en la medida en que las personas comprenden la razón de ser de nuestro grupo empresarial e incorporan las
conductas que favorecen las estrategias; dicho pensamiento entonces, no está ligado únicamente a las prácticas
laborales, sino también al nivel de involucramiento organizacional que se expresa en compromisos éticos.
Los compromisos que cada uno de nosotros asumimos como sujetos laborales, con nuestra empresa, con nuestros
compañeros, con nuestra comunidad, emergen de los valores que palpitan en la organización y se materializan en
nuestro trabajo del día a día. Cada valor se hace presente y cobra vida en nuestras relaciones y
actuaciones.
Las conductas o comportamientos éticos, no son simples actuaciones; por el contrario, devienen de un trabajo que
va de lo individual a lo colectivo, donde convergen, además, las competencias y cualidades que hacen valiosos a
nuestros funcionarios, de la mano de valores organizacionales que posibilitan la integración de una ética
empresarial.
Coherencia entre valores y atributos
Valores EPM
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Atributos de marca
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Transparencia
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Abierta / Fiable
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Responsabilidad
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Global / Eficiente / Responsable
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Calidez
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Humana
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