- Con esta iniciativa, la Fundación Ideas para la Paz, en alianza con EPM, busca
fortalecer la confianza entre comunidades, autoridades locales y la empresa.
- La apuesta se centra en generar confianza y dialogar para transformar
relaciones en pro del desarrollo territorial en los 12 municipios del área de
influencia de la futura central de generación de energía.
- La Ruta tendrá tres estaciones y se cumplirá entre marzo y noviembre de 2021.
EPM, en alianza con la Fundación Ideas para la
Paz (FIP), diseñaron la Ruta de la Confianza, una iniciativa que desde marzo
empezará a recorrer los 12 municipios que hacen parte del área de influencia del
proyecto hidroeléctrico Ituango (PHI): Ituango, San Andrés de Cuerquia, Toledo,
Briceño, Valdivia, Yarumal, Olaya, Buriticá, Peque, Sabanalarga, Liborina y Santa
Fe de Antioquia.
Al respecto, Mónica Ruiz Arbeláez, Gerente General de EPM, indicó que “la Ruta
de la Confianza busca conectar personas, renovar lazos de confianza entre las
comunidades, las autoridades locales, EPM y el proyecto hidroeléctrico Ituango,
mediante la generación de espacios de diálogo”.
Robinson Miranda, Director Ambiental y Social del PHI, dijo que “Con la FIP
compartimos la idea que para transformar los territorios y las relaciones se debe
partir de la generación de confianza, con el diálogo como una herramienta
transparente, honesta y propositiva. También estamos de acuerdo con que los
verdaderos cambios se dan cuando se reconoce que hay diferentes posturas para
abordar las diferencias de manera civilizada”, sostuvo el directivo.
Más cerca
Desde hace cuatro años, la FIP, en su apuesta por aportar a la construcción de paz
en Colombia, desarrolla una agenda enfocada, precisamente, en transformar las relaciones entre empresarios, autoridades locales y comunidades en regiones donde hay gran actividad empresarial y baja legitimidad de las instituciones, así
como obstáculos y dificultades para convivencia. “Le hemos apostado a una fórmula sencilla y prometedora: dialogar para generar confianza, tener mayor confianza para transformar las relaciones, y que estas relaciones renovadas
impulsen la cooperación y el desarrollo”, explicó María Lucía Méndez, Directora de Empresas y Construcción de Paz de la FIP.
Una Ruta con tres estaciones
La Ruta de la Confianza tendrá tres estaciones o paradas lideradas por la FIP, que
se desarrollarán entre marzo y noviembre de 2021. En la primera estación se
medirá cómo están las relaciones entre las comunidades, las empresas y las
autoridades. Durante la segunda estación se fortalecerán habilidades
socioemocionales y capacidades para renovar la confianza y, en la tercera
estación, se buscará que el diálogo lleve a acciones que promuevan el trabajo
colectivo.
El proyecto cuenta con un equipo humano experimentado que hará presencia
permanentemente en el territorio.
EPM participará en la Ruta de la Confianza a la par que una líder de una Junta de
Acción Comunal o un funcionario de las alcaldías que participen. “Todos, desde
nuestras realidades, buscamos lo mismo: el desarrollo territorial sostenible, el
bienestar de la región y la armonía con nuestro entorno. Para esto debemos
entender que la confianza es un valor colectivo que debe ser promovido y que el
desarrollo solo es posible desde la cooperación”, agregó Robinson Miranda.
La Ruta de la Confianza no resolverá las diferencias que existen en el área de
influencia del PHI, pero sí trabajará en nuevas formas para abordarlos, donde la
clave es el reconocimiento del otro. “Para dialogar se necesita compromiso,
paciencia, escucha y construir confianza. Esa es la apuesta de esta Ruta”, sostuvo
María Lucía Méndez.
Antecedentes
Entre 2017 y 2020, la FIP y EPM se encontraron en una iniciativa similar a La Ruta
de la Confianza. En este período la FIP lideró un proceso cuyo propósito era
contribuir con la transformación de relaciones en tres territorios del país en los
cuales existían tensiones entre sectores y presencia de operaciones
empresariales. Uno de estos territorios fue el Cañón del Porce (Antioquia) donde
las comunidades, las autoridades y el sector empresarial (principalmente EPM)
tuvieron la oportunidad de construir escenarios de diálogo y nuevas formas de
relacionamiento para la promoción del desarrollo territorial.
Contexto
En Colombia, la confianza tiene pronóstico reservado. Datos recientes del
Barómetro de la Reconciliación revelan que solo el 22% de los colombianos
confían en sus vecinos. Sin embargo, el 71% cree que ellos los ayudarían, en caso
de necesitarlo. Algo parecido ocurre con los empresarios. En general, se desconfía
de este sector, pero hay una alta creencia en que las empresas pueden hacer algo
para transformar la realidad, según el Barómetro de Confianza de Edelman.
Estos hallazgos indican que la confianza, por más fracturada que se encuentre,
tiene enormes oportunidades para renovarse. Está probado que las sociedades
con bajos niveles de confianza tienen menor capacidad y tardan más tiempo en
superar crisis. Por ello, para medir la confianza entre sectores que tienen que
relacionarse en entorno complejos, la FIP diseñó el instrumento YoConfío, que ha
sido aplicado en varios municipios en Colombia al comienzo y al final de iniciativas
como la Ruta de la Confianza. La más reciente medición arrojó que el 56% de las
personas que participaron, mejoraron su nivel de confianza.