- Hoy trabajan en el proyecto 3.200 personas en diversos
frentes de obra con la meta de entrar a operar en 2022.
- La caverna de transformadores ya se encuentra lista y
limpia. Se labora en estabilización de cavernas y galerías.
- EPM avanza en la disminución de los riesgos para las
comunidades ubicadas aguas abajo, el cuidado ambiental
y la recuperación técnica del proyecto.
El Gerente General de EPM, Álvaro
Guillermo Rendón López, realizó este viernes 11 de septiembre una
visita al proyecto hidroeléctrico Ituango para hacer seguimiento a las
obras principales -que ya alcanzan el 80% de ejecución- y dar un
mensaje de apoyo y admiración a los trabajadores.
“Nada nos hará retroceder, vamos a seguir trabajando por la defensa
de la vida. Gracias a ustedes que son los héroes que día a día con su
esfuerzo y dedicación nos ayudan para entregar este proyecto al país
en 2022”, indicó el Gerente General de EPM.
Con cerca de 3.200 colaboradores se sacan adelante las obras, que
permitirán controlar completamente los riesgos de las comunidades
ubicadas aguas abajo de la presa, y generar el 17% de la energía que
el país necesita para su crecimiento.
Actualmente se encuentran reactivados frentes claves. En la casa de
máquinas se realizan demoliciones en las unidades 1 y 2 y, al mismo
tiempo, se estabiliza para evitar riesgos. Faltan cerca de 6 metros para llegar a la base y colocar los cimientos para iniciar el montaje de los
generadores, de estas dos unidades, aproximadamente en dos meses.
El proyecto continúa en contingencia y se progresa en la estabilización
de cavernas y galerías. Los frentes activos son los trabajos que se
adelantan en el túnel de descarga intermedia, para pasar a la
construcción del tapón de concreto en la Galería Auxiliar de Desviación
(GAD), con una longitud de 23 metros, que permitirá sellar
definitivamente este túnel.
Ya está lista y limpia la caverna de transformadores para que sean
instalados siete nuevos transformadores que se recibirán en noviembre
próximo y en 2021 otros 12.
En las obras a cielo abierto se trabaja en la estabilización del macizo
rocoso en la parte alta de los pozos de compuertas. Igualmente, la
operación de las compuertas del vertedero, subestación eléctrica, el
mantenimiento de vías y el monitoreo del comportamiento del embalse,
la presa y el vertedero.
Después del recambio de personal y la limpieza de las instalaciones que
se tuvo que efectuar como medida para combatir el coronavirus
(COVID-19), a mediados de julio pasado, hoy los trabajadores cumplen
con estrictos protocolos de bioseguridad y ponen su empeño para sacar
adelante una obra que aportará al desarrollo del país y al bienestar de
los colombianos.